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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

sábado, 28 de febrero de 2015

VENEZUELA: CARTA PÚBLICA AL DEFENSOR DEL PUEBLO TAREK WILLIAM SAAB / por Fortunato González



"...No existe una sola actuación de la Defensoría del Pueblo que sea un ejemplo digno de reconocimiento en la defensa de los derechos humanos. Por el contrario, se convirtieron en encubridores y por lo tanto en cómplices de los delincuentes..."


La muerte del niño Kluiverth Roa es la más actual, dolorosa y cruel muestra de lo que han hecho con la policía y con la fuerza armada, que muchas veces actúa como criminales con los que pareciera existe una alianza. Aquí en Mérida hay cientos de casos de jóvenes heridos de bala, y perdigones de plomo, metras y tornillos.


CARTA PÚBLICA A TAREK WILLIAM SAAB


Fortunato González Cruz
Mérida-Venezuela, 27/02/2015
Como profesor de Derecho Constitucional y presidente de la Asociación Venezolana de Derecho Constitucional, hoy emérito, he expresado mi reconocimiento al excelente trabajo realizado por la Comisión sobre los Derechos Humanos que redactó el título de los derechos humanos en la Constitución de 1999. Reconozco el esfuerzo realizado para fundamentar los derechos humanos, darle rango constitucional a los tratados y convenios internacionales en esta materia, dejar sentado que los derechos humanos son inherentes a las personas aún aquellos que no estén fundamentados en normas positivas. Se llevó al rango constitucional hasta el derecho que tenemos los venezolanos a disponer de bienes y servicios de calidad. Fue una buena idea permitir que cualquier juez investigara los delitos contra los derechos humanos tal como lo señaló usted entre otras ocasiones en su intervención del 21 de octubre de 1999, negada lamentablemente por una interpretación restrictiva de la Sala Constitucional que se ha atrevido a desconocer el propósito del Constituyente. Abrir las puertas de la justicia internacional para perseguir los delitos contra ellos es otra ganancia que la Comisión defendió en su momento, que también insistió en el derecho a la manifestación pacífica y sin armas y a prohibir el uso de armas de guerra y sustancias tóxicas para reprimir las protestas. También en la presunción de inocencia, en el derecho a ser juzgado en libertad y en las demás garantías procesales, en la responsabilidad del Estado por la integridad física, psíquica y moral de las personas bajo custodia su custodia.

La creación del Defensor del Pueblo fue una de las iniciativas loables. En fin, usted contribuyó a modernizar nuestra Carta Magna en materia de Derechos Humanos. He revisado sus intervenciones en la Asamblea Nacional Constituyente y respetuosamente me permito recordarle la propuesta de la progresividad de los derechos que supera con creces la disposición de la Constitución de 1961. 

Lamentablemente sus predecesores no creían en eso y se colocaron al servicio del gobierno, de sus policías, de sus militares que cometieron y comenten abusos de toda naturaleza. En 15 años las cárceles que se pretendían dignificar son depósitos inhumanos de seres humanos condenados sin juicio y sin sentencias, antros del vicio y de todo tipo de violaciones a los derechos que la Constitución les reconoce. 

Al ser usted designado Defensor del Pueblo, pese al extraño procedimiento que se siguió, era a mi modesto juicio una garantía para que una vez en el ejercicio de esa delicada responsabilidad, superara Venezuela el tristísimo papel de los predecesores suyos que se colocaron en forma vergonzosa a defender al Estado y a sus agentes en la violación de los derechos humanos. No existe una sola actuación de la Defensoría del Pueblo que sea un ejemplo digno de reconocimiento en la defensa de los derechos humanos. Por el contrario, se convirtieron en encubridores y por lo tanto en cómplices de los delincuentes. 

El sistema político sostenido en la Constitución de 1999 se fue alejando gradualmente de los valores y principios en ella consagrados, y degenerándose en un “socialismo estalinista fracasado” como lo reconoce el ex ministro Felipe Pérez, con un gobierno que viola sistemáticamente los derechos y desconoce las garantías procesales. Los sueños de 1999 nadan en un pozo de anarquía, militarismo, corrupción, despilfarro, violencia criminal, impunidad y autoritarismo y han degenerado al país que se coloca entre los más corruptos y peligrosos del mundo. 

Usted sabe que la función de Defensor del Pueblo lo coloca del lado del pueblo y frente al gobierno que por tener el monopolio de la fuerza y de las armas es el primer violador de los derechos humanos. No es una situación particular de Venezuela sino de cualquier país, porque quien está en el poder tiene a abusar de él, y donde existe la figura del Defensor se escoge alguien con una gran autóritas sin vinculaciones con quienes gobiernan, precisamente para evitar ataduras y solidaridades que le impidan actuar con eficacia.

La muerte del niño Kluiverth Roa es la más actual, dolorosa y cruel muestra de lo que han hecho con la policía y con la fuerza armada, que muchas veces actúa como criminales con los que pareciera existe una alianza. Aquí en Mérida hay cientos de casos de jóvenes heridos de bala, y perdigones de plomo, metras y tornillos. El derecho a la vida, señor Tarek, es el más violado en nuestro país y usted ha tenido la valentía, o me temo la osadía, de postularse para su defensa.

Permítame la satisfacción de seguir señalándolo con orgullo como uno de los autores del más hermoso título de nuestra Constitución, el de los derechos humanos. Sea usted consecuente y asuma la tarea de hacer realidad su aporte como constituyente. Sus predecesores serán cubiertos por el olvido y si acaso serán recordados por su indigno papel, pero la historia, con usted, será implacable.


**Fortunato González, es Catedratico de la U.L.A. de Mérida-Venezuela / Miembro de la Academia de Ciencias Políticas y Sociales / Fundador y Director de la Cátedra de Tauromaquia "G. Briceño Ferrigni" de la U.L.A. y Presidente del Capítulo Nacional de Venezuela del Círculo T. A. Dinastía Bienvenida.

3 comentarios:

  1. Encomiable este gesto del profesor Fortunato González de denunciar la complicidad con el crimen de la oficialidad gubernamental de Venezuela y en este caso señalando a quien más obligación tiene de ejercer la aplicación de los derechos humanos para la población como es el Defensor del Pueblo, un auténtico tiburón del chavismo-comunismo que en pocos dias llevan seis jóvenes asesinados por sus propias milicias.
    Fortunato González no está solo en la lucah por la libertad en su país pero su voz es muy importante y su conducta causa ejemplaridad para aquellos que sueñen con la liberación de su país venezolanoa arrasado y arruinado por esta casta financiadora de la casta española de coleta y piojo, con hoz y martillo amenazando a la población con implantar un sistema despótico y depredador como el que instauró el sanguinario Chavez al servicio del castrismo cubano, y que continúan los militares ladrones del patrimonio venezolano con un imbécil como Maduro al frente de un supuesto gobierno que persiguen cualquier atisbo de oposición y apresan o asesinas al que mínimamente les estorba para sus fines ilegítimos.
    Voces como las de Fortunato González harían falta en España y pronunciadas por políticos o intelectuales de la talla moral e independencia de este luchador por la libertad democrática de su país abandonado por los llamadas naciones democráticas y tolerando toda clase de tropelóias de un Régimen comunista y ladrón.


    saludos y suerte, hermanos venezolanos.

    F. Vilches

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  2. Lo que está pasando en Venezuela es de una brutalidad y falta de sentimientos que horroriza la sensibilidad humana. Pero hubo tantas Venezuelas cerca de nosotros los españoles, que todavía hoy recordamos cuando se descubrieron no hace tantos años algunos balazos para conservar intacto su poder destructivo. Se exhumó una fosa común de más de treinta metros de largo en Gumiel de Izán (Burgos). La hipótesis de que allí estuvieran enterrados un grupo de ferroviarios que fueron asesinados el 18 de agosto de 1936 es una de las que se barajan para poder llegar a establecer la identidad de aquellos muertos que yacen, uno detrás de otro, en un paraje conocido como La Legua. Los investigadores en su momento han establecido, a partir de las vainas de fusil y las balas rotas encontradas junto a los huesos, que muchos de ellos cayeron allí mismo de un disparo en la cabeza. Son esos balazos los que siguen resonando porque todavía no se sabe a quiénes se llevaron por delante. Se han encontrado un crucifijo, que pudo haber pertenecido a un franciscano de la zona al que trataban de rojo por criticar la miseria en la que vivían los campesinos, y un corsé ortopédico, que acaso perteneció a un maquinista de la estación de Aranda de Duero.

    También habría que recordar a los mártires del siglo XX en España, firmes, y valientes testigos de la fe. "Por la fe, los mártires entregaron su vida como testimonio de la verdad del Evangelio, que los había transformado y hecho capaces de llegar hasta el mayor don del amor, con el perdón de sus perseguidores".

    Este fue el mensaje con motivo de la Beatificación del Año de la fe, en Tarragona, el 13 de octubre de 2013, de Benedicto XVI

    Queridos hermanos:
    Os anunciamos con gran alegría que, Dios mediante, el domingo día 13 de octubre de 2013, se celebrará en Tarragona la beatificación de unos quinientos hermanos nuestros en la fe que dieron su vida por amor a Jesucristo, en diversos lugares de España, durante la persecución religiosa de los años treinta del siglo XX. Fueron muchos miles los que por entonces ofrecieron ese testimonio supremo de fidelidad. La Iglesia reconoce ahora solemnemente a este nuevo grupo como mártires de Cristo. Según el lema de esta fiesta, ellos fueron "firmes y valientes testigos de la fe" que nos estimulan con su ejemplo y nos ayudan con su intercesión. Invitamos a los católicos y a las comunidades eclesiales a participar en este gran acontecimiento de gracia con su presencia en Tarragona, si les es posible, y, en todo caso, uniéndose espiritualmente a su preparación y celebración.

    Comunistas, anarquistas, nacionalistas, socialistas, sindicalistas, carlistas, falangistas, franquistas, republicanos, y vaya usted a saber quién más, siguen sirviéndose de la Guerra Civil para reforzar sus propios relatos (ya sea como víctimas, ya sea como salvadores) sobre lo que pasó, y para justificar o adornar su discurso sobre el presente. Preguntarle al pasado por una cuenta pendiente conduce a seguir situando la discusión en el terreno político. Y así, 75 años después de que empezara todo, siguen imponiéndose aquellas versiones en las que predomina el blanco y negro y se difuminan los grises.
    3
    No siempre es posible dar una explicación unívoca a hechos complejos, pero eso no significa que valga cualquier relato, y mucho menos que el esfuerzo por acercarse con el mayor rigor a los hechos signifique amenazar, como se ha dicho, la libertad de expresión del historiador. ¿Por qué hubo una guerra? Podrá haber infinidad de matices en la respuesta, pero esta se produjo porque un grupo de militares, con un amplio respaldo civil, no consiguió que triunfara el golpe de Estado con el que pretendían tomar el poder y detener así las reformas que había puesto en marcha la República. ¿Qué régimen se impuso al terminar el conflicto? Una dictadura personalista, que se apoyó en el ejército, en la Iglesia y en un partido único, y que desencadenó una brutal represión para garantizar su continuidad.

    Casimiro Escudero


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  3. Al golpe de Estado del 17 y 18 de julio de 1936 en España siguió de forma casi inmediata una brutal represión ejercida desde ambos bandos que, persiguiendo la eliminación física del adversario, produjo decenas de miles de muertes.

    Estudios, basados en evoluciones demográficas, cifran en 540 000 la sobremortalidad de los años de la Guerra Civil y la inmediata posguerra, y en 576 000 la caída de la natalidad. La estimación de víctimas mortales en la Guerra Civil Española consecuencia de la represión puede cifrarse en 200 000 personas. De ellas, se calcula en unas 50 000 las asesinadas en la retaguardia de la zona republicana, calculándose en 100 000 las asesinadas en la retaguardia de la zona sublevada, a las que hay que añadir unas 50 000 ejecuciones en la represión franquista que siguió a la Guerra Civil. Estas estimaciones, aún en 2009, estaban sometidas a revisión; aunque las víctimas producidas por el bando republicano fueron bien identificadas, las producidas por los sublevados, habiendo sido ignoradas durante el franquismo, hoy existen dificultades para cuantificarlas e identificarlas. «Las investigaciones realizadas hasta la fecha demuestran que un alto porcentaje de desaparecidos no consta en registro alguno».Debido a ellas España, con más de 114 000 desaparecidos, es «el segundo país del mundo, tras Camboya, con mayor número de personas víctimas de desapariciones forzadas cuyos restos no han sido recuperados ni identificados».

    Federico Figueredo

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