la suerte suprema

la suerte suprema
Pepe Bienvenida / La suerte suprema

lunes, 18 de septiembre de 2017

No se puede caer más bajo / por Rafael Comino Delgado

"El ser humano es digno por ser humano, pero hay humanos, como los políticos a los que nos estamos refiriendo, que han dilapidado su dignidad, pues no se puede caer más bajo. ¡Malditos sean!.."

Como decía, no habrá referéndum ni independencia, pero el enorme daño que están haciendo a toda España, muy especialmente a los catalanes, hecho está, y han de pasar muchos años para que cicatricen las heridas ya causadas, porque el odio, incluso entre padres e hijos, entre hermanos, entre familiares, entre amigos, es fácil de fomentar y se extiende como lo es el fuego, pero borrarlo no es tan fácil. 


No se puede caer más bajo

Rafael Comino Delgado
Catedrático de la Universidad de Cádiz
El gobierno catalán y todos los que de alguna manera le apoyan han perdido el juicio, la vergüenza y, sobre todo, se han perdido el respeto a sí mismo, que es la mayor pérdida que se puede concebir, según Mahatma Gandhi.

Hemos de matizar que entre los que le apoyan hay unos que realmente quieren una Cataluña independiente, pero otros, como es el caso de Podemos y toda la izquierda radical, lo que quieren es romper España sin importar la forma. Siguen vomitando odio y quejándose por las heridas sufridas en una guerra que ellos provocaron, porque creían la tenían ganada y perdieron de forma apabullante. 

En los años de la transición, por gran mayoría (78,78% de los votantes), acordamos perdonar y darnos una Constitución, que votó todo el que quiso con derecho a voto, el día 6 de Diciembre de 1978. Pero hay algunos, muchos de ellos ni siquiera habían nacido entonces, que no perdonan, porque no pueden, porque su mente y su corazón son inagotables manantiales de vileza y odio. Les falta grandeza de espíritu, y ahí siguen queriendo romper España, porque creen que eso les beneficia personalmente.

Iglesias apoya a los separatistas, pero todos sabemos que si en España tuviéramos un gobierno comunista de esa izquierda radical, por ejemplo con don Pablo Iglesias mandando, a estas alturas Puigdemont y todos su gobierno estarían en la cárcel y en las Ramblas, la Diagonal, etc., habría tanques -y es posible que algunos estuviesen en el cementerio- de haber ido tan lejos como han ido.

Pero a lo que vamos. Puedo aceptar que haya quien tenga deseos independentistas y quiera llevarlos cabo por causes legales, pero nunca aceptaré que haya quien quiera lograr la independencia por las vías que están empelando, incumpliendo la ley, insultando constantemente al Rey, a la Bandera, al Himno Nacional, a todos los españoles y apoyando el terrorismo. Dicen que España es un "Estado asesino" pero no lo es, porque si así fuera muchos de ellos estarían en su sitio. Todos los que así actúan son delincuentes.

Han llevado a Arnaldo Otegui y lo han paseado por Cataluña, aclamándole y homenajeándole y, se mire como se mire, el Sr. Otegui es un terrorista, es un asesino, es un criminal que, en mi opinión, debería estar en la cárcel cumpliendo condena perpetua. Lo digo con máxima contundencia y convicción. Los que mató o mandó matar perdieron su vida, pero él sigue entre los vivos siendo agasajado por unos seres despreciables, lo que es un insulto a al humanidad, pues nunca se arrepintió. ¡Es un asesino de lo peor, y los que le han llevado a Cataluña, para reivindicar la independencia, son la hez de la sociedad catalana!

Hay que estar totalmente trastornado mentalmente, hay que albergar mucho odio en el corazón, hay que ser muy mezquino, para recurrir a tan sanguinario asesino (del que Zapatero dijo era un hombre de paz. Por eso lo que diga Zapatero no merece el más el mínimo respeto) con el objetivo de lograr la independencia.

Conozco a muchísimos catalanes, tengo allí muchos amigos, a los que siempre consideré personas moderadas, dialogantes y nunca pensé que los catalanes, ni siquiera los más independentistas, pudieran caer tan bajo. Pero entre unos y otros, con Rovira, Tardá, Junqueras, toda la ERC que sigue teniendo terrorista en sus filas, la honorable y prospera familia Pujol, el 3 %, Arturo Más, Puigdemont, la CUP, etc., han llevado a Cataluña a una situación impensable en el primer mundo y en el siglo XXI. Realmente el espectáculo que están dando al mundo entero es propio de gentes incívicas, salvajes diría yo.

Todos los que están dirigiendo este desafortunado y disparatado proceso saben que no habrá referendum ni lograran la independencia, y sin embargo siguen tirando el dinero de los catalanes, y de todos los españoles, siguen mintiéndoles y manejándoles como hacen los líderes populistas con quienes les siguen, como maneja Maduro a sus turbas. Si alguno de esos que manejan los hilos de este esperpéntico espectáculo cree que les puede llevar a buen puerto es que está totalmente loco.

Como decía, no habrá referendum ni independencia, pero el enorme daño que están haciendo a toda España, muy especialmente a los catalanes, hecho está, y han de pasar muchos años para que cicatricen las heridas ya causadas, porque el odio, incluso entre padres e hijos, entre hermanos, entre familiares, entre amigos, es fácil de fomentar y se extiende como lo es el fuego, pero borrarlo no es tan fácil. 

Estoy seguro de que habrá padres que ya morirán enemistados con sus hijos, que habrá hermanos que morirán sin hablarse, que habrá amigos que morirán enemistados debido a todo el odio que unos políticos miserables, mezquinos, que no merecen ni el aire que respiran, han inyectado en su corazones.

La bajeza moral de tales políticos es infinita. Fíjense como será que se han perdido el respeto hasta el punto de ignorar toda la corrupción que tienen allí, aceptarla como algo normal, incluso defender a los corruptos, y en cambio pasear y homenajear a un terrorista, a un asesino con tal de ir contra el resto de España, del que se creen superiores. Y lo son, pero solo en avaricia, en soberbia y en odio que es la cólera de los débiles (Alphonse Daudet) y la venganza de los cobardes. 

Deberían saber que, como dijo Víctor Hugo, "cuanto más pequeño es el corazón, mas odio alberga", y que solo se deja de odiar cuando se empieza a respetar (Tertuliano), lo que pasa es que si no se respetan a sí mismos como van a respetar a los demás.

El ser humano es digno por ser humano, pero hay humanos, como los políticos a los que nos estamos refiriendo, que han dilapidado su dignidad, pues no se puede caer más bajo. ¡Malditos sean!

No hay comentarios:

Publicar un comentario